Tintas solventes:
La base de su composición es un solvente volátil que contiene los pigmentos de color. El resultado es muy duradero y resistente, por lo que se utilizan principalmente para elementos de uso exterior, ya que tiene una vida útil aproximada de cinco años en superficies plásticas con alta exposición al sol.
Tintas ecosolventes:
Se trata de un tipo de tinta que no contiene materiales nocivos o peligrosos para la salud y el medio ambiente. Cuenta con una vida útil menor y una intensidad más baja de los colores, pero supone una buena alternativa para evitar la alta contaminación de los tipos de tintas más habituales.
Tintas de curado UV:
Estas tintas tienen una propiedad muy llamativa, y es que, se mantienen en estado líquido de forma habitual, pero reaccionan ante la exposición de la luz ultravioleta. Entonces, se curan y polimerizan construyendo una capa muy resistente y duradera, además de colorida. Son adecuadas para multitud de soportes, incluso de usos exteriores, debido a su resistencia, de hasta cinco años en cualquier condición climatológica. Además, se utiliza menos cantidad de producto en cada impresión, por lo que también resultan más rentables.